Consiga Pretender

Capítulo 6: El factor Oikos • 147

Stephen me escuchó; vivimos juntos, vendimos drogas juntos, compartimos amigos y vivimos juntos. Y, cuando el evangelio tocó mi vida, naturalmente pude compartir las buenas nuevas de la oferta de Cristo a él. Como embajador de Cristo, debe ver su vida (y todas las relaciones y conexiones que Dios le ha dado) como vías para que pueda dar un testimonio claro y efectivo de Cristo a aquellos en su círculo único. A menudo lamentamos que no hayamos sido llamados al “ministerio de tiempo completo” como si la única difusión válida del evangelio se hiciera a través de pastores, misioneros y obreros cristianos. Nada más lejos de la verdad. Dios ha llamado y dotado a cada discípulo de Cristo para usar su tiempo, tesoro y talento para compartir las buenas nuevas con aquellos dentro de sus círculos de vida, su familia, amigos y asociados únicos. Toda persona que nos reconozca, o a quien reconozcamos, que nos “posea” y sea un “pariente nuestro”, puede ser orada, relacionada y presenciada en nombre de Cristo. ¡Si cada creyente orara, se comunicara y compartiera las buenas nuevas con aquellos en su propio círculo, podríamos tocar a millones de personas más con el Evangelio y no contratar a un solo “trabajador a tiempo completo” para unirse a la causa! De hecho, estoy convencido de que la clave para ganar a aquellos que no conocen a nuestro Señor no será el reclutamiento de una nueva clase profesional de obreros cristianos, sino la movilización de discípulos ordinarios de Jesús para compartir con sus amigos, familiares y asociados. donde viven y trabajan. ¡Esta es la revolución que necesitamos y la causa que debemos buscar! Porqué todos debemos abrazar la evangelización Oikos hoy Creo que podríamos transformar el ministerio tal como lo conocemos hoy si pudiéramos pretender y simplemente afirmar