Dios el Espiritu Santo, Guia del Mentor, MG14

D I O S E L E S P Í R I T U S A N T O

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Esta lección se enfoca en analizar la manera en que la obra profética del Espíritu Santo nos permite conocer y responder a la verdad. El Espíritu nos da ambos: la verdad sobre Dios en palabras humanas y luego el poder para entender y aceptar estas palabras. Sin el ministerio profético del Espíritu Santo, nadie podría conocer a Dios o entender cómo reconciliarse con Él a través de su Hijo. No es posible captar el conocimiento de Dios a través del esfuerzo humano, sino que únicamente se logra por la determinación de Dios de darse a conocer a nosotros. Dios se revela a sí mismo y a sus propósitos por medio de las palabras proféticas inspiradas por el Santo Espíritu. Las Escrituras son la autoridad final para evaluar las afirmaciones sobre Dios y su verdad. El Espíritu Santo inspiró las Escrituras, guiando a los escritores a escribir palabras que revelan la verdad de Dios. Ningún autor de la Escritura inventó las verdades escritas, en vez de eso, le fueron enseñadas a través de la revelación profética. Toda la Escritura es profecía en un sentido básico. La revelación profética es por medio del ministerio directo del Espíritu Santo. El profeta es una persona sobre la cual reposa el Espíritu Santo, y la revelación profética es un don del mismo Espíritu. Cualquier reclamo de dirección profética en la actualidad debe ser juzgado y evaluado a la luz de las Escrituras, las cuales son el parámetro obligatorio de la verdad para toda la gente, en todo tiempo y en todo lugar. El Espíritu ilumina en forma activa (aclara el significado) las Escrituras que él mismo inspiró. El Espíritu ilumina las Escrituras a través del ministerio de la enseñanza que dio a su Iglesia y a través de su obra en la mente y corazón de la gente que escucha la Palabra de Dios. El Espíritu Santo es el medio por el cual Dios atrae a la gente a sí mismo. Ningún ser humano busca, cree, entiende y acepta la Palabra de Dios sin el ministerio activo del Espíritu Santo en sus vidas. Jesús explícitamente dijo que la obra del Espíritu Santo es convencer al mundo de pecado. El ministerio del Espíritu Santo habilita a una persona a reconocer que es un pecador, culpable ante Dios y merecedor de castigo. El ministerio de convicción del Espíritu Santo quita toda excusa y justificación propia, produciendo un cambio repentino hacia el pecado y un remordimiento genuino a causa de la desobediencia a Dios.

Resumen de conceptos importantes

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