Dios el Padre, Libro de Notas Del Estudiante, SW06

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D I O S E L P A D R E

Un Dios ausente

Debido al alto índice de crímenes violentos en la comunidad, su iglesia lleva a cabo una reunión de oración para los miembros de la comunidad. Ha organizado caminatas y vigilias de oración, y sus fieles son profundamente conscientes de las fuerzas espirituales que activan la violencia y crueldad que ocurren en la vecindad. Durante una de las sesiones de oración, un residente de la comunidad (que no es parte de su iglesia) se levanta y dice, “no vengo a esta iglesia, y francamente, no voy a ninguna iglesia porque parece que a Dios no le importamos como le importan otros. ¿Por qué nuestra vecindad siempre tiene que vivir aterrorizada y en la miseria? Él parece preocuparse mucho más por la gente que vive en los barrios residenciales ricos que por nosotros. ¡Parece estar muy ausente por aquí!” Toda la reunión de oración se detiene, y le miran a usted esperando una respuesta para el clamor de este vecino frustrado. ¿Qué palabras de explicación y alivio daría en la reunión de oración frente a esta observación? Por un buen tiempo ya se ha gestado una lucha entre los miembros de su iglesia local en cuanto al nuevo énfasis en “alabanza y adoración íntimas”. Hastiado ya de la naturaleza antigua de los himnos y de la liturgia del pasado, el nuevo líder de adoración ha estado infundiendo en el orden del servicio nuevos cantos de alabanza y adoración, muchos de los cuales hablan de Dios en términos muy íntimos y personales. Algunos de los feligreses más ancianos se oponen, porque entienden que si bien la nueva música y el énfasis hacen que Dios parezca más personal, dicen que todo el temor a Su persona se ha desvanecido. Les preocupa que el temor a Dios haya sido reemplazado por un sentimiento de que el Señor es mi Camarada Cósmico. ¿Quién tiene la razón y quién se equivoca aquí? ¿Pueden ambos estar en lo correcto o en el error al mismo tiempo – cómo? ¿Si usted fuera el líder de esta iglesia, cómo podría usted ayudar a ambos lados a entender que la inmanencia y la trascendencia de Dios enriquecen nuestra adoración a Dios? Un prolegómeno , un estudio “de las primeras cosas” de la doctrina de Dios, humildemente afirma que Dios debe revelársenos antes de que podamos conocerlo. Dios se nos ha revelado de dos modos especiales. En la revelación general, Dios se revela a toda la gente en todas partes, y en la revelación especial , Dios se revela a seres humanos particulares en tiempos y sitios particulares. En su relación con su universo creado, Dios es tanto inmanente como trascendente . La inmanencia de Dios se refiere a su participación presente y activa en toda la creación, mientras que la trascendencia de Dios se refiere a la verdad que El Señor es mi amigo

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Reafirmación de la tesis de la lección