Enfoque en la Reproduccion, Guia del Mentor, MG12

E N F O Q U E E N L A R E P R O D U C C I Ó N

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Lo que verdaderamente califica

Hoy día en muchos entornos eclesiásticos, el principal criterio para acceder al liderazgo cristiano es la preparación académica y profesional. En otras palabras, a menos que tengamos un título de seminario o alguna credencial académica y profesional, muchas congregaciones no nos colocarían siquiera en la lista de candidatos (si es que uno quisiera presentarse) para una posición de liderazgo pastoral. Algunas iglesias van más allá todavía, exigiendo una credencial de seminario o algo semejante para ministrar en la música, el grupo de jóvenes, los niños u otros ministerios. ¿Qué es lo que verdaderamente califica a una persona para ejercer el liderazgo en la iglesia de Dios? Sea específico. El ministerio pastoral está desataviado en varios lugares. Muchos ministros abandonan sus cargos, siendo absorbidos por la “vida secular”. Algunas denominaciones están desesperadas por nuevos candidatos pastorales; el número de seminaristas disminuye, y tienen que implementar formas innovadoras para compartir los pastores con las congregaciones, permitiéndoles ser itinerantes, es decir, que pastoreen varias congregaciones a la vez. Algunas áreas son realmente difíciles, y muchos líderes denominacionales se lamentan que los sistemas actuales de formación de líderes son lentos, caros e insuficientes. ¿Por qué cree que se está haciendo difícil encontrar pastores calificados para muchas de las iglesias ya existentes? ¿Qué nos sugiere esto en cuanto a la necesidad de formar una nueva generación de líderes, usando estrategias diferentes para entrenarlos y financiarlos? En una conversación sobre la naturaleza de la iglesia y el pastorado, un profesor dijo algo bastante impactante sobre las iglesias urbanas. Comentó que muchas iglesias no eran verdaderamente iglesias en el sentido tradicional; eran una mezcla de religiones folclóricas, creencias cristianas y redes sociales y familiares, a las cuales apenas podía llamárseles “cristianas” debido a que no contribuían como otras iglesias a las estructuras teológicas y ministeriales de la iglesia histórica. Sin mostrar una pizca de emoción, el profesor siguió diciendo que si usáramos el criterio tradicional de iglesia, que fue reconocido por la mayoría de las denominaciones a lo largo de la historia de la misma, algunas apenas calificarían, y otras no serían iglesias en absoluto. ¿Cuál sería su definición Es difícil ser pastor. Esas no son verdaderamente iglesias.

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