La red SIAFU

14 La red SIAFU – Guía

La misión de la red SIAFU (pronunciado si-á-fu ) es establecer una red viable y efectiva de hombres y mujeres cuyo objetivo sea inspirar a los demás cristianos urbanos a tomar toda la responsabilidad por la propia vida de otros y el bienestar. Como soldados de Cristo, los cristianos urbanos deben defender nuestros matrimonios y familias, por nuestras iglesias y congregaciones, y por nuestras comunidades para hacer avanzar el Reino de Cristo en la ciudad. ¿Por qué es necesario SIAFU? Es necesario porque tenemos que encontrar nuevas maneras de montar juntos con el fin de facultar a otros para hacerse amigo y mentor de unos a otros para llegar a los miembros de la familia que no tienen iglesia y amigos con el Evangelio. Además, podemos utilizar estas reuniones para discipular a los nuevos cristianos a vivir la vida cristiana, y para desafiar a otros para servir como guardianes y siervos fieles en nuestras respectivas iglesias cristianas. Una asamblea local es un puesto de avanzada del Reino, donde el Señor pudo haber colocado esa iglesia. A través de SIAFU, esperamos trabajar juntos como iglesias y discípulos con el fin de identificar, entrenar y lanzar obreros piadosos, espiritualmente calificados que puedan comenzar nuevos ministerios, iglesias saludables, y llegar a los barrios urbanos perdidos para Cristo. Al reflexionar sobre los argumentos y aplicaciones establecidos en esta guía, será útil para que usted pueda tener en cuenta el principio de reversión. En pocas palabras, se da testimonio de que en el Reino de Dios, todo es al revés de cómo se ve y significó en el mundo. La ética del Reino requiere que usted entienda la vida desde una nueva perspectiva, desde el punto de vista de Dios, por así decirlo, y comprender las posibilidades de cambio y transformación a través de sus ojos, y no el suyo propio. Este libro argumenta que la movilización de los discípulos urbanos es la única manera de que las ciudades del mundo, posiblemente, puedan ser evangelizadas y transformadas. Ellos y sólo ellos deben estar a la altura y responder a la gracia de Dios con la entrega y la pasión de ver a Dios hacer cosas nuevas en la ciudad.

Esto no es una idea nueva, sino que este principio de Dios de trabajar con los más pequeños y humildes está bien documentado en las