La red SIAFU

Parte I : Montaje de los guerreros de Dios

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Montaje de los guerreros de Dios: Hacia una estrategia para ganar la ciudad

Con el fin de entender por qué SIAFU puede ser importante para la iglesia urbana y la penetración de la ciudad con el Evangelio de Cristo, tenemos que lidiar con las primeras verdades del Reino y su relación con la espiritualidad urbana. Nunca deberíamos comenzar una discusión sobre el ministerio urbano con nuestra propia reacción y respuesta al caos y la necesidad de la ciudad. Nunca deberíamos fingir que lo que somos y lo que pensamos de nosotros mismos puede servir como el fundamento del ministerio del reino legítimo. Más bien, la palabra del apóstol Pablo a los corintios debe servir como la estrella polar de nuestra perspectiva, iluminando nuestro cielo mientras navegamos por las aguas inexploradas de la misión urbana. Para cambiar esta metáfora por un momento, Pablo desafió a los corintios en 1 Corintios 3:5-11 con una palabra acerca de la importancia de conseguir y mantener las primeras cosas primero: ¿Qué entonces es Apolos? ¿Qué es Pablo? Servidores por medio de los cuales habéis creído, según el Señor dio a cada uno. Yo planté, Apolos regó, pero Dios ha dado el crecimiento. Así que ni el que planta ni el que riega es algo, sino Dios que da el crecimiento. El que planta y el que riega son una misma, y cada uno recibirá su propia recompensa conforme a su labor. Porque nosotros somos colaboradores de Dios. Vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios. Conforme a la gracia de Dios me es dada, como perito arquitecto experto, puse el fundamento, y otro edifica sobre él. Que cada uno tome cuidado cómo edifica encima. Pues nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, que es Jesucristo.