Orando los Salmos con Agustín y Amigos

Capítulo 5 Salmos 81–101

Salmo 81 con Agustín – Quemando los ídolos No tendrás ningún dios extranjero (v. 9). ¿Por qué adorar lo que no existe? Yo soy el SEÑOR tu Dios (v. 10). “Yo te saqué de Egipto” (Éxod 20:2). No solo a ellos, pues todos fuimos sacados de la tierra de Egipto. Todos hemos atravesado el Mar Rojo. Nuestros enemigos que nos perseguían perecieron en las aguas. No seamos ingratos con nuestro Dios; no olvidemos a Dios que permanece, ni creemos en nosotros un nuevo dios. El Señor dice: Abre bien la boca, y te la llenaré (v. 10). ¿Sufres angustia a causa del nuevo dios erigido en tu corazón? Rompe la imagen del orgullo. Derriba el ídolo de tu conciencia: abre bien tu boca, en alabanza, en amor, y el Señor la llenará, porque con él está la fuente de la vida. Pero mi pueblo no me escuchó (v. 11). Porque Dios solo hablaría estas cosas a su propio pueblo. Porque, “Sabemos que todo lo que dice la Ley, lo dice a quienes están sujetos

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