Para la Proxima Generacion

Apénd i ce 147

incluyendo nuestro matrimonio y familia, de tal manera que le sirvamos como Señor sobre todo. 3. El llamado también nos desafía a que adoptemos nuestra nueva identidad en Cristo, como extranjeros y peregrinos en este mundo, actuando y trabajando como ciudadanos del Reino de Dios en este mundo, como representantes de Jesús. 4. El estilo de vida del discipulado se demuestra cuando respondemos positivamente al llamado de vivir como siervos sacrificados para Su gloria. Como esclavos de Cristo, consagramos todo lo que somos y tenemos para glorificarlo y cumplir Su voluntad en este mundo, por medio de Su dirección. 5. También somos llamados a vivir y trabajar en comunidad, como miembros de la gloriosa familia de Dios en Su mismo pueblo ( laos ). 6. Los discípulos de Jesús son llamados a vivir en la libertad de Jesucristo, pero usando esa libertad como oportunidad para obedecer el Gran Mandamiento, y dar testimonio claro con el propósito de salvar a otros por la causa de Cristo. 7. La Palabra que llama al discipulado, comunidad y libertad, también nos llama a la misión. Como representantes del Reino de Dios, somos llamados a cumplir la Gran Comisión, a batallar contra nuestro enemigo espiritual, el diablo, y mostrar la vida del Reino, a través de nuestro amor y buenas obras.

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Enseñando los objetivos de cada