Pelea La Buena Batalla de la Fe

L ECCIÓN 4 E L LEGADO QUE RECIBIMOS El papel del Espíritu Santo en la buena batalla de la fe

Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas *; a otros, pastores * y maestros, a fi n de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edi fi cación del cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo; para que ya no seamos niños fl uctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error, sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo.

~ Efesios 4:11-15

Al final de esta sesión, usted deberá comprender El legado que recibimos al creer que: • El Espíritu Santo mora en cada creyente, y dota a cada creyente con dones al servicio del cuerpo. • Se nos ha dado la libertad en Cristo para ejercer nuestros dones, como el Espíritu Santo nos ofrece oportunidades para servir. • A través de la dirección del Espíritu, dones, y fortaleza, contamos con el poder suficiente para vivir en fuerte comunión con otros creyentes en la iglesia, que crecen juntos en la madurez y la unidad. Eterno Dios, mi Padre, dices en tu Palabra que eres la fuente de todo conocimiento y sabiduría. Reconozco esto como la verdad, querido Padre, y pido que impartas en mí la sabiduría divina, para que pueda ser capaz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . *Evangelistas se re fi ere a aquellos obreros dotados por el Espíritu para comunicar e fi cazmente las buenas nuevas del Evangelio a los perdidos. Mientras que a todos los creyentes se nos manda compartir el Evangelio, algunos son más dotados en esta área y útiles para edi fi car el cuerpo de Cristo. *Los pastores son “pastores” asignados a cuidar el rebaño, es decir, la iglesia local. Los pastores deben proteger el rebaño a través de su enseñanza bíblica, consejo santo y estimulación, advertir de los peligros a las ovejas y dirigir el rebaño para llevar a cabo la obra de Dios en sus comunidades.

Objetivos

Oración de apertura por sabiduría

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