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L E C C I Ó N 2 | I N T E R P R E T A C I Ó N B Í B L I C A : E L M O D E L O D E L O S T R E S PA S O S / 4 9

de obediencia. Muchos eruditos creen que Malaquías fue probablemente escrito en el tiempo de Nehemías, y que Ester fue escrito durante los eventos registrados en Esdras 6 y 7. Este tiempo lleno de acontecimientos en la historia de Israel provee consejos claves para la necesidad de los hombres y mujeres que se preparan para la obra de Dios. Nuestro texto para este devocional registra el tipo de vida y objetivos de la persona que Dios usa para traer avivamiento, renovación y frescura a su pueblo. “Porque Esdras había preparado su corazón para inquirir la ley de Jehová y para cumplirla, y para enseñar en Israel sus estatutos y decretos”. De acuerdo a nuestro texto, Esdras había “preparado su corazón”, literalmente “arregló su alma” para hacer tres cosas para el Señor. Primero, Esdras preparó su corazón para estudiar la ley del Señor. No había nada a medias, él no tenía sus ojos dormitados para ver a medias la Palabra de Dios, sino que seguía un estudio disciplinado, apasionado, y enfocado en la ley de Dios. La Biblia no puede ser bien conocida a menos que se busque el conocimiento de Dios al igual que los buscadores de tesoros buscan el oro; las profundidades escondidas y el significado del texto simplemente no pueden hallarse ni entenderse sino es de esta manera (Pr. 2:1-9). El corazón haragán e indisciplinado nunca llegará a conocer las riquezas de la sabiduría de Dios referente a su plan de salvación en Cristo. Segundo, él había preparado su corazón para cumplir. En otras palabras, Esdras no vivía para estudiar, sino que estudiaba para vivir. El estudio de la Palabra de Dios no es meramente escuchar la voluntad de Dios referente a la fe, obediencia, amor, y servicio. El propósito es cumplir con ella, y la bendición del texto se relaciona no solamente con aquellos que reflexionan en la Palabra sino los que responden a la misma con humildad y diligencia (Stg. 1:22-25). La sabiduría del Señor viene a aquellos que llevan a cabo su voluntad al descubrirla en su santa Palabra (comp. Sal. 111:10. El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; buen entendimiento tienen todos los que practican sus mandamientos, su loor permanece para siempre). Finalmente, Esdras había preparado su corazón para “enseñar sus estatutos y reglas en Israel”. Una vez que la Palabra de Dios es bien utilizada por medio del estudio y cumplida por medio de la obediencia, entonces el siervo de Dios está listo para dirigir su ministerio a través de la enseñanza. Las prioridades de Esdras referentes a su acercamiento y ministerio de la Palabra estaban en el orden apropiado: él se preparó a sí mismo para estudiar la perfecta ley de Dios, cumplirla, y luego enseñarla. Este tipo de consideración cuidadosa y preparación del corazón, es una descripción de las cosas genuinas que son parte esencial de los santos, obreros cristianos, profetas, y apóstoles. El énfasis no está en la misión, el trabajo, la bendición, o los dones. El énfasis está en la Palabra de Dios, en estudiarla, manejarla, ponerla en práctica, y luego, una vez que es conocida y

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E s t u d i o s B í b l i c o s