Plantando iglesias entre los pobres de la ciudad: Una antología de recursos de plantación de iglesias urbanas Volumen 2 - Imprimible

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Muestra de solicitud de membresía Iglesia Cualquier Nombre The Urban Ministry Institute

La declaración de misión de la Iglesia Cualquier Nombre

Como una comunidad de fe y amor, nosotros los miembros de Iglesia Cualquier Nombre centramos nuestra fe y vida en Jesucristo. Creemos que el Señor nos ha llamado juntos para ser su pueblo, nos dedicamos a la celebración de nueva vida en Cristo como su real sacerdocio, cultivando la comunidad cristiana como miembros de Su familia, comunicando a Cristo y Su Reino a los perdidos como sus embajadores, y cuidar a nuestros miembros y a otros con la compasión de Cristo como siervos de Dios.

Declaración doctrinal de Iglesia Cualquier Nombre

Las Escrituras son la Palabra inspirada de Dios y son la autoridad final para la fe y vida Cristiana (2 Pe. 1:20-21; 2 Tim. 3:16-17; Mt. 5:17-19; 24.35; Mt. 4:4; Jn. 8:31-32). Dios existe eternamente en tres personas, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo , y se ha revelado a sí mismo para ser perfecto en amor, justo en todos Sus caminos y creador de todas las cosas (1 Tim. 1:17; 1 Cor. 8:4; 2 Cor. 3:14; Gn. 1:1; Mt. 28:19; Is. 6:3; 57:15; 1 Jn. 4:10-16; Sal. 145:17; Col. 1:16-17). Jesucristo es el Hijo eterno de Dios . Como verdadero Dios y verdadero hombre Él mismo permitió nacer de una virgen, enseñó a los hombres como vivir a través de su vida sin pecado, fue crucificado como un sacrificio por nuestros pecados, resucitó corporalmente de los muertos, fue visto por más de 500 personas y volvió al cielo a preparar un lugar para nosotros. (Lc. 1:35; Jn. 1:1-4, 14; Is. 7:14; Mt. 1:20-23; 1 Pe. 2:21 25; Ti 2:14; 1 Jn. 2:2; Hch. 2:22-24; 32-36; 1 Cor. 15:3-8; Jn. 14.1-3). Los hombres y mujeres fueron creados a la imagen de Dios , tentados por Satán y voluntariamente se rebelaron contra Dios. Por medio del arrepentimiento y fe personal en Jesucristo, somos perdonados por nuestros pecados, renacemos por el Santo Espíritu y venimos a ser hijos de Dios (Gén. 1:26-27; 2.7; Sal. 100:1-3; Gn. 3:13, 16-17; Rom. 3:10-12, 23; 2 Cor. 7:9-10; Ef. 2:8-9; Ef. 1:3-8; Jn. 1:12-13; 2 Cor. 5:17).