Plantando iglesias entre los pobres de la ciudad: Una antología de recursos de plantación de iglesias urbanas

P ARTE I: D ESARROLLANDO CONGREGACIONES URBANAS • 69

Planifique las finanzas

Las finanzas pueden ser una bendición o una maldición para la nueva congregación. “Manejadas con cuidado, las finanzas son una fuente de orgullo y logro . . . mal manejada, se convierten en una fuente de deuda, desgracia y división”. 133 Por tanto, es esencial que las transacciones financieras de la joven iglesia se lleven a cabo con integridad.

Cuando los compañerismos de discipulado se mueven para comenzar la celebración hay tres tareas a realizar:

1. Determine las necesidades financieras de la iglesia. 2. Identifique los recursos financieros. 3. Administre el dinero.

Determine las necesidades financieras de la Iglesia Las necesidades financieras de la celebración por lo general se centran en los costos de un lugar de encuentro temporal, el apoyo para el liderazgo, ministerios a la comunidad y un lugar permanente para el nuevo trabajo. 134 La iglesia debe ser flexible en la determinación de un lugar de encuentro temporal. A menudo inconvenientes deben ser tolerados en las primeras etapas. Es aconsejable que no más de un tercio del presupuesto se vaya hacia el alquiler de una instalación. 135 La cantidad del presupuesto necesario para apoyar al liderazgo depende de la naturaleza del ministerio de la iglesia. A menudo las iglesias jóvenes hacen bien con un pastor a tiempo parcial. El liderazgo laico bi-vocacional es la base de muchas de las estrategias de plantación de iglesias, especialmente en las zonas pobres. 136 La estrategia de World Impact requiere un equipo de plantadores de iglesias que se han asociado con líderes aprendices de la comunidad. Juntos llevan a la iglesia hasta que los líderes aprendices pueden asumir el liderazgo completo o hasta que la iglesia está lista para llamar a un pastor que ha sido entrenado en otro lugar.

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133 Redford, pág. 82

134 Ver Jones, págs. 104-107 para una lista detallada de las necesidades.

135 Ver Redford, pág. 83

136 Ver Patterson, Perspectives on the World Christian Movement , pág. 606