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Capítulo 6: El factor Oikos • 139

Pero venida la fe, ya no estamos bajo ayo, [26] pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; [27] porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. [28] Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús. [29] Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según la promesa. ~ Gálatas 3:25-29 Cuando, de hecho, nos arrepentimos y creemos, nos convertimos en los mismos hijos del Padre, compartiendo el ADN de Dios a través del Espíritu Santo, entrando en la familia de Dios a través de la fe en Cristo (Juan 1:12-13). El instrumento vivo de la Palabra de Dios es aquello por lo cual nacemos desde arriba (1 Ped. 1:22-25), y el arrepentimiento y la fe son los medios por los cuales nacimos (Hechos 2:38-39). El Espíritu Santo nos regenera, uniéndonos para siempre con Cristo y su vida (1 Cor. 12:13; Tito 3:4-7), y nos convertimos en los propios hijos de Dios, miembros de su familia y herederos de Cristo en Dios (Rom. 8:14-17) La implicación de esto es clara para todos nosotros: la imagen de la familia es una de las figuras centrales del Espíritu para describir el proceso de arrepentimiento, fe y nuevo nacimiento en Cristo . Testamento se dan claramente en el Antiguo Testamento. Según Hans Walter Wolff en Anthology of the Old Testament ( Antología del Antiguo Testamento ), “Un hogar generalmente contenía cuatro generaciones, incluidos hombres, mujeres casadas, hijas solteras, esclavos de ambos sexos, personas sin ciudadanía y “extranjeros” o trabajadores extranjeros residentes”. Esto muestra que la familia incluía el lugar de la unidad generacional (cuatro generaciones), Oikos : El término más común para “familia” Las raíces del concepto de red familiar ( oikos ) del Nuevo