Iglesia poco común (Uncommon Church, Spanish Edition)

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PARTE 1: IGLESIA POCO COMÚN

forma en que Jesús eligió vivir es una demostración de la realidad de que en el reino de Dios no hay jerarquía basada en la clase social. En cambio, el camino hacia el estatus en el reino es la fe, el servicio y la obediencia. Jesús creció en Nazaret, que era como el barrio. Cuando Natanael escuchó que Jesús era de allí, se sorprendió. Se preguntó en voz alta si algo bueno podría salir de tal lugar (Juan 1:46). Era una ciudad pequeña, oscura y separada en las afueras de la enorme ciudad de Séforis, de la que la gente estaba orgullosa de ser. Ningún judío se jactaba de ser de Nazaret. Para ellos, era el hogar de la base del ejército romano de ocupación. Jesús era un hombre común. Debemos sacar de nuestras cabezas esas bonitas escenas de tarjetas de Navidad de Jesús naciendo de manera espectacular en un establo brillante y alegre. En su lugar, piense en una habitación oscura y maloliente del sótano utilizada para albergar animales. Pesebre es una palabra elegante para el plato de la cena para los animales. Ninguno de nosotros querría que nuestros hijos nacieran en esas condiciones. Así no es como los ricos entran al mundo. Jesús entró de la manera más humilde y ordinaria imaginable. Hubo varias ceremonias por las que pasó una familia judía después del nacimiento de un bebé (Lucas 2:21-24). Si era un hombre, el bebé era circuncidado después de ocho días y dedicado a Dios después de un mes. Después de cuarenta días, los padres debían traer un cordero, una paloma o un palomo para una ofrenda por el pecado. El hecho de que María y José ofrecieran un par de palomas o dos palomas jóvenes indica su condición financiera; Solo los ricos traían corderos. Jesús claramente no creció en una condición de