Meras Misiones
E l E vangelio : E vangelizar • 129
es el príncipe de la potestad del aire (Efesios 2:2). Ha usurpado lo que por derecho es de Dios. Toda la creación es el Señor porque Él creó todas las cosas (Apocalipsis 4:11). Llegará un día en que toda la creación será restaurada a la plenitud del dominio de Dios (Rom. 8:19-22). Hasta entonces, debemos ir a nuestra Jerusalén, Judea, Samaria y los confines del mundo, proclamando la Buena Nueva de que hay liberación y libertad del campo de concentración de tiranía de Satanás. Debemos proclamar: “Son libres en Cristo. Salgan por la puerta hacia la libertad, la plenitud y la justicia que les ha dado su Libertador, Jesucristo”. Sólo la Iglesia puede abordar y servir una necesidad particular del mundo, y esa es la necesidad espiritual. Es la necesidad de todas las necesidades y la causa y raíz de todas las demás necesidades que aquejan a la humanidad. Debemos luchar para tener esto presente de forma clara y constante. Nuestro enemigo espiritual hará todo lo que pueda para desviar a la Iglesia y hacer que trabaje en los síntomas en lugar de en la causa fundamental de todas las necesidades. El Señor Jesús nos ha llamado a suplir la necesidad más profunda en el alma de cada persona, la necesidad espiritual que, de no ser satisfecha, tiene consecuencias para su destino eterno, ya sea para “llanto y crujir de dientes” (Mt. 8:12) o para gloria. (Romanos 5:2). La proclamación del Evangelio es la única táctica de la Iglesia para liberar el alma atada al pecado, a Satanás y a la muerte. No es proclamación más demostración. Es sólo proclamación. El Evangelio proclamado, mediante la obra del Espíritu Santo, puede mantenerse por sí solo. No necesita ninguna ayuda en absoluto. Vi de primera mano en Skid Row (Los Ángeles) que los salvados y los no salvos pueden satisfacer, y de hecho lo hacen, las infinitas necesidades de nuestro mundo herido y destrozado. En Skid Row se necesitan pies limpios, calcetines nuevos y una comida caliente. En un mundo caído vi a la humanidad en su mejor momento haciendo justicia, mostrando misericordia, amando a su prójimo como les gustaría ser amados si estuvieran en la misma situación. Pero esto no son misiones. Sin una proclamación verbal del
Made with FlippingBook Digital Proposal Maker