Orando los Salmos con Agustín y Amigos

46

Orando los Salmos con Agustín y amigos

Salmo 20 con Juan Calvino – Confianza en Dios Este salmo contiene una oración en favor del rey de Israel, para que Dios lo socorra en el peligro; y en favor de su reino, para que Dios lomantenga seguro y lo haga prosperar: pues en David se centraba la seguridad y el bienestar de toda la comunidad. A esto se añade la promesa de que Dios presidirá el reino que él fundó y velará eficazmente por él para preservarlo con seguridad. Ahora sé (v. 6). Aquí los fieles declaran con gratitud haber experimentado la bondad de Dios en la preservación del rey. Dios mostró su fidelidad por medio de su poder para mantener el reino de David. Dios es el guardián del reino que él mismo fundó. Puesto que David es llamado Mesías, o ungido, para que los fieles se persuadieran de que era un rey legítimo y sagrado, a quien Dios había elegido mediante la unción. Los fieles atribuyen la liberación de David de grandes peligros a la gracia de Dios. Estos confían en sus carros de guerra (v. 7). Parece natural para casi todas las personas ser más valientes y confiados mientras más riquezas, poder y fuerzas militares poseen. El pueblo de Dios aquí afirma que no pone su esperanza en sus fuerzas militares, sino solo en la ayuda de Dios. Como el Espíritu Santo aquí opone la ayuda de Dios a la fuerza humana, debe notarse que siempre que nuestras mentes están ocupadas por la confianza humana, caen al mismo tiempo en el olvido de Dios. Es imposible que aquellos que esperan la victoria confiando en su propia fuerza tengan su mirada puesta en Dios. Por lo tanto, el escritor inspirado usa la palabra recordar para mostrar que cuando los santos se acercan a Dios, deben despojarse de todo lo que les impediría depositar su confianza exclusiva en él. Este recuerdo de Dios tiene dos propósitos importantes para los