Orando los Salmos con Agustín y Amigos

62

Orando los Salmos con Agustín y amigos

Salmo 30 con Agustín – Dador de gozo eterno Te exaltaré, SEÑOR, porque me levantaste (v. 1). Alabaré a tu gran Majestad. Porque no dejaste que mis enemigos se burlaran de mí (v. 1), los que tantas veces han intentado oprimirme con diversas persecuciones por todo el mundo. SEÑOR mi Dios, te pedí ayuda y me sanaste (v. 2). Señor, Dios mío, a ti he clamado, y ya no arrastro un cuerpo debilitado y enfermo por la mortalidad. Tú, SEÑOR, me libraste de los dominios de la muerte; me hiciste revivir de entre los muertos (v. 3). Me has salvado de las tinieblas profundas y delmás profundopantanode carne corruptible. Pero cuando escondiste tu rostro, yo quedé angustiado ( v. 7), porque a veces has apartado tu rostro del pecador, y me turbé cuando me ocultaste tu conocimiento iluminador. Pero ahora, convertiste mi lamento en danza; me quitaste la ropa de luto y me vestiste de alegría (v. 11). Has rasgado el velo de mis pecados, la tristeza de mi mortalidad; y me has envuelto con el primer manto, con el gozo eterno.