Para la Proxima Generacion

122 Para la próx ima generac i ón: Manua l de l Mentor de E l I ns t i tuto Mi n i s ter i a l Urbano

Haciendo frente con las dificultades en el aula

Las controersias doctrinales Operar un satélite de TUMI es experimentar una buena cantidad de controversia, conflicto y debate. Este tipo de interacción en el aula es inevitable y muy valiosa, dado que sus estudiantes pudieron haber sido formados espiritualmente en diversas persuasiones teológicas en sus respectivas denominaciones cristianas. Un papel importante de su responsabilidad intelectual en el aula es servir como árbitro y facilitador al maniobrar a través de temas difíciles y espinosos con sus estudiantes. Al negociar los diversos tipos de interacciones entre y dentro de ellos, tendrá que ser siempre consciente de los peligros del extremismo y el dogmatismo. Hacer caso omiso de la realidad de conflicto no lo eliminará, tenemos que hacerle frente, con amor y directamente, y confiar en que el Espíritu Santo nos aclare, amorosos y útiles, al hacer frente a estos asuntos. Por supuesto, usted tendrá que ser sensible a las diferencias genuinas en la doctrina y la práctica entre sus estudiantes. Las diferencias no son ni cosméticas ni sin importancia, sino que como dice el refrán: “las diferencias hacen toda la diferencia en el mundo”. En el debate doctrinal y teológico, debe tratar de reconocer y afirmar lo real, las diferencias sustantivas entre los alumnos y las tradiciones que representan. Tendrá que hacer hincapié en nuestro compromiso común al antiguo consenso de la fe, así como el status interdenominacional de TUMI. No buscamos ni alterar ni dictar lo que nuestros estudiantes representan en sus diversas comuniones, sino sólo mostrar que todas las legítimas tradiciones de la fe cristiana derivan su identidad y la sustancia del núcleo cristiano ortodoxo de creencias y práctica, que se asentaron desde la época apostólica. Es posible que de vez en cuando le toque silenciar al polemista en medio de usted, es decir, el estudiante cuyo único deseo es el de discutir sobre cada punto obtuso de la teología y la doctrina. Si bien debemos fomentar el diálogo y la interacción, busque hacer hincapié en la importancia de la etiqueta y la cortesía al comprometernos unos a otros, y darnos cuenta de que nuestra forma de resolver nuestras diferencias es tan importante como el asunto de la materia. Esforcémonos para que la libertad en los no esenciales, por fidelidad a lo esencial de la fe, y por caridad, el amor y la gracia en todos los asuntos de la teología y la doctrina que se discutan en nuestras aulas.

Haciendo frente con las dificultades en el aula

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