Representado la teologia

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R e p r e s e n t a n d o l a t e o l o g í a

Que venga Tu Reino: “La historia de la gloria de Dios” (continuación)

VII. El Reino del Ya/Pero todavía No (leer los apéndices «Un esquema para una teología del Reino y la Iglesia» y «Viviendo en el Reino de EL YA y EL TODAVÍA NO» ) A. Satán fue atado, a través de la encarnación y la pasión de Cristo. 1. Jesús ha triunfado sobre el diablo, 1 Jn. 3.8. 2. Jesús es coronado como Señor de todo, Heb. 1.4; Fil. 2.5-11. 3. Satán es ahora juzgado, Lc.10.17-21. 4. El poder de Satán ha sido severamente acortado, Stg. 4.8. 5. Su autoridad ha sido derrotada, 1 Pe. 5.8. 6. Su siervos están siendo derrotados, Col. 2.15. 7. Sus sistema se está desvaneciendo, 1 Jn. 2.15-17. 8. Aquellos a quien esclavizó están siendo liberados, Col. 13-14. 9. Su destino eventual ha sido asegurado, Ro. 16.20. B. Aunque Satanás ha sido derrotado, aún es letal y espera su propia destrucción total. 1. “Atado, pero con una soga larga”, 2 Co. 10.3-5; Ef. 2.2 2. “Un león rugiente, pero enfermo, hambriento, y enojado”, 1 Pe. 5.8 3. Satán continúa siendo el enemigo activo del Reino de Dios 4. Ciega las mentes de aquellos que no creen, 2 Co. 4.4 5. Funciona a través del engaño, la mentira, y la acusación, Jn. 8.44 6. Anima los asuntos de las naciones, 1 Jn. 5.19 7. Distrae a los seres humanos de sus fines adecuados, Gn. 3.1 8. Oprime a los seres humanos a través del acoso, difamación, temor, acusación y muerte, Heb. 2.14-15 9. Resiste y persigue al pueblo de Dios, Ef. 6.10-18

Cuando Cristo tomó su silla en el cielo, Él demostró

concluyentemente que la devastación de Satán era completa, que él fue completamente deshecho. El infierno fue lanzado en bancarrota total. Satán sólo no fue despojado de sus autoridades legales y dominio, sino él fue despojado de sus armas también por una fuerza infinitamente superior. Pero esto no es todo. Cuando Jesús prorrumpe de aquella prisión oscura “y ascendido en lo alto”, todos los creyentes fueron levantados y asentados juntamente con Él, “Pero Dios… nos trajo a vida con Cristo… Y en la unión con Cristo Jesús él nos levantó y nos entronó con él en los reinos celestiales” (Efesios 2.4-6 NEB). ~ Paul Billheimer. Destined for the Throne . Minneapolis: Bethany House Publishers, 1996. p. 87.