Teología de la Iglesia, Libro de Notas del Estudiante, SW03

T E O L O G Í A D E L A I G L E S I A

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2. No se nos permite alterar el mensaje; debemos contextualizar el mensaje sin cambiar ni añadir cosa alguna, Gál. 1.8-9.

3. La Iglesia lleva el testimonio de Jesús cuando va al mundo, con una libertad creativa, evangelizando a los perdidos por la predicación del evangelio de Cristo.

II. El segundo elemento de la gran comisión es el bautismo: Testificamos por medio del bautismo. Como miembros de la Iglesia somos llamados a bautizar a los nuevos creyentes en Cristo, es decir, debemos incorporarlos y establecerlos como miembros en la Iglesia.

La confesión de Cristo guía inevitablemente a la asociación con Su pueblo. Si un profesante cristiano rehúsa identificarse con el pueblo de Dios, puede indicar que no se ha arrepentido y creído verdaderamente. Donde no hay un compromiso con la iglesia, probablemente no existe salvación en Cristo. Todos los creyentes son incorporados al cuerpo de Cristo a través del bautismo. Cuando bautizamos nuevos creyentes en el Señor Jesús, los introducimos en nuestra comunidad

A. Primero, se nos ordena bautizar a los nuevos creyentes en la fe, Mc. 16.15-16.

1. La fórmula bíblica para el bautismo:

3

a. Debemos bautizar en el nombre del Dios Trino, Mt. 28.19.

b. Esto equivale a ser bautizado en el nombre de Jesucristo. Mientras que algunos discuten que esto difiere de la fórmula trinitaria, la declaración de Pablo en Efesios 4.5 que hay “un bautismo” sugiere que el bautismo en el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo es equivalente a ser bautizado “en el nombre de Cristo Jesús”, o en Jesucristo. Pedro declara a los judíos en Pentecostés en Hechos 2.38, “Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo”.

de fe, y debemos establecerlos en el fundamento, las

primeras verdades de la fe, e incorporarlos como miembros vitales en la asamblea Cristiana.