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Capítulo 6: El factor Oikos • 141

inmediatas y extendidas, nuestras amistades, aquellas conectadas a nuestra red de contactos y asociaciones . Me refiero a nuestros oikos más cercanos al sentido que se usa en las Escrituras, en lugar de nuestra forma típica de entender a la familia como nuestro núcleo familiar inmediato. ( Oikos ) y el evangelio en el Nuevo Testamento Una de las formas más emocionantes de comprender el poder de los oikos es ver cómo el evangelio se extendió a través de la familia, los amigos y los asociados a través de redes que siguieron las relaciones de los oikos . La iglesia de Jerusalén adoró, fue organizada y discipulada en las redes oikos reveladas en las conversiones de Pentecostés (Hechos 2:46; 5:42; 12:12). Las buenas nuevas de Jesucristo a menudo se compartían en los entornos naturales de las personas en su red de relaciones y amistades, por ejemplo, Cornelio y su familia (Hechos 10-11; cf. Hechos 10:24). También parece que el núcleo de la mayoría de las iglesias misioneras plantadas por Pablo estaban formadas por uno o más hogares (redes oikos ) donde, naturalmente, él compartió las buenas nuevas de salvación (ver los hogares de Lidia y el carcelero en Filipos, Hechos 16:15; los hogares de Estéfanas, Crispo y Gayo en Corinto, Hechos 18:8; Rom. 16:23; 1 Cor. 1:14-16; 16.15; y los hogares de Priscila y Aquila, así como Onesíforo en Éfeso (1 Cor. 16:19; 2 Tim. 1:16; 2 Tim. 4:19) Esto también es cierto para los oikos de Filemón en Colosas (Flm. 1:1-2), Ninfa en Laodicea (Col. 4:15-16), y Aristóbolo, Narciso y otros en Roma (Rom. 16:10-11). Lo que es realmente emocionante, al mirar la evidencia bíblica, es que los hogares oikos , una vez convertidos a Jesús y su Reino, podrían constituir una iglesia. Pablo podría referirse a “la iglesia ( ekklesia ) que se reúne en su casa ( oikos )” (Rom. 16:3-5). Los diversos “códigos de hogar” en Efesios y Colosenses – esposo y