El Ministerio Facultativo, Guia del Mentor, MG15

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E L M I N I S T E R I O F A C U L T A T I V O

ekklesia . Eso también garantiza la universalidad del ministerio, ya que el llamado de Dios es para todo el pueblo “reunido” o “llamados-juntos”, es decir, para todos los santos (Ef. 4.1). El cuidado pastoral es responsabilidad de “uno con el otro” es decir, parte del llamado a la congregación. Casa de familia (Gál. 6.10; Ef. 2.19) es otro término utilizado para definir a la iglesia en el Nuevo Testamento, esto es significativo en los primeros años de la iglesia, ya que funcionaba en hogares (Ro. 6.11; 2 Ti. 4.19). La iglesia es una comunidad así como la familia, en la cual las relaciones son amistosas antes que institucionales o contractuales. Es preciso conocer lo que pasó cuando las iglesias se mudaron de los hogares a antiguos templos paganos o edificios construidos específicamente ya que este proceso involucró mover el altar desde el hogar a la iglesia. Gracias a Dios algunos ministerios pueden ser recuperados a través de los grupos hogareños. Los maestros (junto a los apóstoles, profetas, evangelistas y pastores) han sido especialmente ungidos con el poder de Dios, con el propósito de hacer madurar a toda la Iglesia para que cada miembro sirva de manera práctica en el Reino de Dios y lleve a cabo la obra del ministerio revolucionando el ministerio urbano. En días en los cuales existe una mayor tendencia hacia los ministerios sofisticados y especializados en las ciudades (ej. criminales, prostitución, desamparo, política corrupta, ciudades sin médicos, etc.) será necesario tomar el principio que dice que cada cristiano puede de hecho participar en el ministerio y realizar una contribución al servicio y cuidado pastoral de otros en sus círculos de amistades. Stevens habla de este punto: En la iglesia primitiva descrita y prescrita en las páginas del Nuevo Testamento, el cuidado pastoral era responsabilidad del pueblo. Cuando Pablo tuvo problemas en Corinto -uno de ellos era el incesto- no escribió a los ancianos que resolvieran la situación. En lugar de esto escribió una carta a la iglesia. Es la iglesia la responsable de la disciplina y el cuidado pastoral. Por lo tanto, las cartas de Pablo están llenas de mandatos que motivan a cuidarse unos a otros (Ef. 4.25-32 es un ejemplo). Lo que hoy llamamos renovación ya ha sido llevado a cabo por la Iglesia del Nuevo Testamento. Esta visión ~ R. Paul Stevens. The Equipper’s Guide to Every-Member Ministry . Vancouver, BC: Regent College Publishing, 2000. pp.56-57.

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