El Ministerio Facultativo, Guia del Mentor, MG15
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E L M I N I S T E R I O F A C U L T A T I V O
que “ellos . . . trastornan el mundo entero”(Hch. 17.6). ¿Cómo hizo este pequeño grupo (sólo 120 en Pentecostés) para crecer tanto? Estos primitivos ganadores de almas fueron también plantadores de iglesias; ellos no estaban satisfechos sólo con que la gente aceptara a Cristo, sino que exaltaban al Salvador viviente e implantaban en sus convertidos las verdades de Dios las cuales cambiaban sus vida y su nación. Para ellos, ser cristiano significaba tener una relación vital con el Cristo resucitado. Su poder fluyendo a través de ellos era irresistible. Pero, ¿qué de nosotros en la actualidad? A pesar de que este poder aún está disponible no es usado efectivamente por el cristiano promedio. Dios no puede ser glorificado en hombres y mujeres que han sido creyentes por años y todavía viven, piensan y reaccionan frente a las situaciones de la vida de la misma forma que la primera vez que confiaron en Cristo. Un seguimiento y un programa consistente de crecimiento para los nuevos convertidos puede ser parte vital del ministerio total de la iglesia. Un seguimiento adecuado es el método más efectivo de traer de vuelta a los miembros indiferentes hacia una vida cristocéntrica. En el NT, el seguimiento es dirigido según las necesidades del individuo. A través de la predicación, enseñanza y servicios de entrenamiento de la iglesia, los principios de seguimiento pueden ser aplicados al grupo, pero siempre en el contexto de la vida de cada miembro. En estos días donde se acostumbra llevar a cabo dinámicas en masa y grupos de reflexión en nuestra estructura social, debemos enfatizar que no podemos ser negligentes con nuestro recurso espiritual para la evangelización del mundo: el laico al que se le ha brindado un seguimiento y cuidado espiritual. Él es la avenida más corta y más efectiva para evangelizar el área de influencia de la iglesia. El aspecto personal del seguimiento es nuestro punto de mayor debilidad, por ende debe ser nuestro mayor interés. Este módulo afirma el derecho y llamado de todos los creyentes, clérigos y laicos, a ser sacerdotes espirituales de Dios y miembros de una sociedad de creyentes, los cuales no han sido únicamente redimidos sino que necesitan ser liberados a fin de llegar a ser redentores . Este estudio busca afirmar las implicaciones de nuestro universalmente compartido don y del llamado a ministrar, además del papel del maestro/discipulador como alguien que perfecciona a los discípulos para hacer la obra el ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo. Discuta estos principios con sus alumnos y asegúrese que comprenden la importancia de los mismos para el ministerio. ~ Waylon Moore. New Testament Follow-up for Pastors and Laymen . Grand Rapids: Eerdmans Publishing, 1973. pp. 17-19.
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