Meras Misiones

110 • M eras M isiones : A vanzando para M ultiplicarnos

engaño de un ángel creado caído, Satanás (la antigua Serpiente) los engañó y los llevó a la rebelión contra su Creador (Gén. 3:1-7). Buscaban ser gobernantes de sus propios dominios y vidas. Esta rebelión contra el legítimo Gobernante y Creador de todas las cosas ha provocado Su ira, y Él está justificado para juzgar, condenar y castigar a los rebeldes y su rebelión (Gén. 3:8-19). El veredicto fue culpable de todos los cargos y el castigo fue rápido, severo (dolor y muerte), y condujo al destierro de la justicia, el gozo y la paz de Su gobierno y reinado (Gén. 3:22-24). Todos deben ser confrontados con la terrible verdad del pecado y la ira de Dios sobre el pecado. (Rom. 1:18; 2:5; 3:23; 6:23; Gén. 3:21-24; Rom. 3:10-18; 2 Tes. 1:7-9; Apoc. 19:15b). Toda la humanidad está infectada y atada al pecado (Romanos 3:23) haciéndonos enemigos de Dios (Romanos 5:10). Esta es una crisis de magnitud incalculable, ya que la ira de Dios podría derramarse en cualquier momento (Rom. 1:18; 2:5; Ap. 14:9-11; Juan 3:36; Jon. 3:7-9). El pecado es una infección cancerosa que ha devastado a toda la raza humana y amenaza su existencia misma. La situación del hombre en su condición caída es patética. Su condición y actitud mutilada, paralizada, arruinada, oscurecida, ciega, esclavizada, temerosa, aterradora, odiadora, huida, intrigante y conspiradora hacen del hombre la más miserable y la más peligrosa de todas las criaturas… El pecado es perversidad moral, maldad social, una dirección falsa de la mente, el afecto, las relaciones y la vida... El pecado es el hombre confrontando a Dios con incredulidad racional (o irracional), con desobediencia voluntaria, con descarado amor propio, autogobierno, auto redención y auto adoración…Un pecado es una guerra incipiente con Dios y todo bien, una alianza con el diablo y todo mal, un infierno potencial que reemplaza al cielo. No es simplemente un asalto al trono de Dios; es el golpe dado de lleno en el rostro del Padre. ~ George Eldon Ladd, Una teología del Nuevo Testamento. El pecado no puede ser exagerado. La ira de Dios está justificada.