Meras Misiones

120 • M eras M isiones : A vanzando para M ultiplicarnos

regresó con fe para expresar gratitud a Jesús. “Tu fe te ha salvado”, fue la respuesta de Jesús (Lucas 17:14-19). Su “salvación” o plenitud fue más que sanidad física. Implicaba un sano estado espiritual. Alimentar milagrosamente a cinco mil (Juan 6) no fue una demostración suficiente para llevar a la mayoría a la fe en Jesús. De hecho, de los cinco mil sólo quedaron doce. Ellos miraron a Jesús y dijeron: “Tú tienes palabras de vida eterna, y nosotros hemos creído y hemos sabido que tú eres el Santo de Dios”. En la historia de Jesús del Rico y Lázaro (Lucas 16:19-31) leemos que el camino al arrepentimiento es la proclamación de Jesús y al escuchar las buenas nuevas, luego arrepentirse y creer. Conocemos la historia. Mueren un hombre rico sin nombre y un hombre pobre llamado Lázaro. Lázaro es “llevado por los ángeles al seno de Abraham”, mientras que el hombre rico está “atormentado en esta llama”, y está separado de Abraham y Lázaro por un gran abismo. El hombre rico le ruega a Abraham que envíe a Lázaro de entre los muertos para advertir a sus cinco hermanos de este tormento eterno y separación de Dios, pero Abraham respondió: “A Moisés y a los profetas tienen; oiganlos ”. Pero el hombre rico no cree que eso sea suficiente y responde: “ No, padre Abraham; pero si alguno fuere a ellos de entre los muertos, se arrepentirán “. Estaba convencido de que necesitaban una demostración visible del mayor de los milagros: que alguien volviera a la vida de la tumba. Esto los llevaría hacia el arrepentimiento y la salvación. Abraham nuevamente afirma en estas últimas palabras al hombre rico: “ Si no oyen a Moisés y a los profetas, tampoco se persuadirán aunque alguno se levantare de los muertos “. ¿Quién es el cumplimiento de la Ley (dada a Moisés) y los Profetas? Jesús es el cumplimiento (Mt. 5:17; Rom. 8:3-4). El único camino hacia el arrepentimiento y la salvación es escuchar las buenas nuevas de Jesús. El objetivo de las misiones no es la transformación de la cultura. La transformación de la cultura es un subproducto de las misiones. Cuando los espiritualmente muertos responden a la fe obediente en Jesucristo, esa vida se transforma en una nueva creación y se