Meras Misiones

E l E spíritu S anto : E mpoderar • 79

Dios Ha Elegido A Los Pobres No es necesario leer muchas páginas del Nuevo Testamento para descubrir de dónde sacó la Iglesia primitiva la idea de que los pobres eran elegidos especialmente por Dios para recibir el Evangelio y difundirlo por toda la tierra. Jesús mismo había anunciado públicamente que estaba predicando intencionalmente el Evangelio a los pobres (Lucas 4:18, Lucas 6:20) e incluso sugirió que esta acción ayudó a demostrar que Él era, efectivamente, el Mesías (Mat. 11:2-6). Basándose en las enseñanzas de Jesús, no es inusual encontrar declaraciones muy explícitas en las Epístolas sobre la elección de Dios y las expectativas para aquellos que no tienen poder, recursos o dinero. Por ejemplo, Santiago enseña: “Hermanos míos amados, oíd: ¿No ha elegido Dios a los pobres de este mundo, para que sean ricos en fe y herederos del reino que ha prometido a los que le aman?” (Santiago 2:5). De manera similar, Pablo escribe: “sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en su presencia.” (1 Cor. 1:27-29). Las palabras “escogió” y “elegido” en Santiago 2 y 1 Corintios 1 provienen de la palabra griega eklégomai que significa “dar favor al sujeto elegido... Implica preferencia y selección entre muchas opciones”. En otros contextos, se usa para describir la elección de Dios de los “escogidos” (Marcos 13:20) y la elección de Jesús de sus discípulos (Lucas 6:13). Estas ideas no son un tema nuevo introducido por los escritores del Nuevo Testamento. Más bien, reflejan fielmente