Orando los Salmos con Agustín y Amigos

Capítulo 5: Salmos 81–101

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¿Cómo será entonces la vida? Muchos placeres contemplo aquí, y muchos se regocijan en este mundo—algunos en una cosa, otros en otra—pero no hay nada que pueda compararse con ese deleite. Preparémonos para otros deleites, pues una especie de sombra es lo que encontramos aquí, no la realidad. Alabemos al Señor en la medida de nuestras posibilidades, pero con una mezcla de duelo; porque mientras alabamos, lo anhelamos, pero aún no lo tenemos. Cuando lo tengamos, todas nuestras penas nos serán quitadas, y nada quedará, sino alabanza, pura y eterna.