Representado la teologia
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R e p r e s e n t a n d o l a t e o l o g í a
Capacitando al pueblo para la libertad, el bienestar y la justicia (continuación)
2.2 Obreros de desarrollo Los obreros de desarrollo son llamados a confrontar condiciones y estructuras en el mundo que no se someten al gobierno de Dios. Por lo tanto, nosotros afirmamos que: Los obreros de desarrollo capacitan a personas, iglesias y comunidades a experimentar movimientos hacia la libertad, el bienestar y la justicia del Reino de Dios. 2.3 El enlace común Tanto los misioneros como los obreros de desarrollos cristianos están unidos en una entrega común para llevar el gobierno del reino de Dios a todas las áreas de la vida. La actividad misionera gira alrededor de la proclamación de las “buenas nuevas” que llaman a la gente al Reino de Dios por medio de las experiencias de la salvación y la regeneración. Se enfoca en atraer a los pueblos, culturas y subculturas a la comunidad de los redimidos (es decir, “trayendo el mundo a la Iglesia”). Todo esto es hecho con un ojo puesto en la creación de iglesias con el propósito de discipular a sus miembros para que reconozcan el gobierno de Dios, y vivan los valores de su Reino en sus vidas personales y corporales. La actividad misionera también cubre el desarrollo que procura que cada área de la vida esté conformada con el gobierno de Dios. En concreto, evalúa cada situación de la vida a la luz de la oración del Padre Nuestro (“venga tu Reino, hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra”) y se involucra en obras de compasión, amor y justicia que demuestran la naturaleza del plan de Dios para toda la gente. Se enfoca en que el gobierno de Dios esté actuando en cada relación y estructura humana (es decir, “llevando la Iglesia al mundo”). 3.1 Una relación asociada La evangelización misionera, la plantación de iglesias y la obra del desarrollo son socios en el proceso de la proclamación, demostración y extensión del gobierno del Rey. Las dos son respuestas al hecho que Dios ha anunciado su deseo de reconciliar al mundo consigo por medio de Su Hijo. Aunque ambas son una legítima respuesta del plan de Dios para el mundo, ninguna es suficiente por sí misma. Tanto la Palabra como las obras son componentes necesarios para anunciar la fidelidad que tiene la Iglesia al Reino de Dios.
3. Relación teológica entre la evangelización y el desarrollo
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